EFÍMERAS

Fueron aquellos dos veranos

música y noche
y piel.

Nos sabíamos parte de un hechizo,

almas fugaces
tocadas por el dedo de la suerte,

conscientes de que todo
(la dicha en especial,
y más cuando es inesperada,
loca,
desenfrenada incluso)
es pasajero,

volátil y mortal

como esas mariposas de verano
que viven unas horas.

Lo sabíamos bien
y fue por ello

que ascendimos,
aladas, locas
y voraces,

a bebernos la luz de los faroles
hasta embriagarnos y caer,
rendidas,

secas, rígidas, frías,

exhaustas y acabadas

sobre el grisáceo asfalto

donde al fin, la mañana,

nos devolvió a la cruda realidad.

#SafeCreative Mina Cb
Imagen: Efímeras, de Jose Miguel Jiménez Arcos