domingo, 30 de octubre de 2016

 


CAJAS

En un momento dado
llegué a meter mi vida en cajas de pañales.

Eran seis.
Lo recuerdo:

Metí el invierno en una,
puse el verano en otra,
en otra los cedés,
los libros en la cuarta
y ya en las quinta y sexta
un rosario de trastos variopintos.

Las contemplaba,
atónita,
precintadas y frías sobre el suelo
de la primera escala
de aquella huida mía hacia el vacío

consciente

del escaso equipaje
de que el alma precisa
cuando quiere volar.

#SafeCreative Mina Cb


sábado, 29 de octubre de 2016

 


 LA MALA HORA

Nos quitan la claridad
y nos ponen el gobierno.

Me temo que es el invierno
que ahora llega de verdad.

#SafeCreative Mina Cb

viernes, 28 de octubre de 2016

 


 ¡SSSSSSHHH!

¿Por dónde te has colado
si tengo las ventanas atrancadas
y el viento del otoño
no traspasó el dintel de los burletes
y la manta no ha sido necesaria
ni ha debido mi cuerpo recogerse
en posición fetal...?

¿De dónde me ha venido
ese cálido aliento tras la nuca
y el tacto de tus dedos
y tu voz susurrando, adormilada
y el verde de tus ojos, al principio,
en esa primavera imaginaria
de besos y de luz...?

#SafeCreative Mina Cb

jueves, 27 de octubre de 2016

 


ÁRIDO

Amores
negro sobre blanco.

Efímeras promesas grafiteadas
que agonizan,
solitarias y absurdas:

anónimos palotes asoleados,
encendidas soflamas
que reclaman su espacio en la retina
mientras mascan oxígeno reseco
y mineral arena ennegrecida
allá donde hasta el tiempo
quiere perder el sur.

#SafeCreative Mina Cb
Imagen de Jose Antonio Tantos Montejo

miércoles, 26 de octubre de 2016

 
 
ONÍRICO

He visto un poema
hace un rato:

 pasó ante mis ojos...
por dentro

detrás

la parte posterior de la pantalla
de un cine de verano.

Se presentó mientras dormía,
las letras deslizándose,
desafiantes,
burlonas,
hermosísimas,
a través de mi cerebro.

Quería abrir los ojos,
buscar a tientas el teléfono,
grabarlo con ese tono de ultratumba
que luego no soy capaz de traducir el la vigilia.

Pero no pude...

Mierda

No pude.

Se me escapó,
efímero, enigmático.

Bello como ninguno.

#SafeCreative Mina Cb

martes, 25 de octubre de 2016

 
 
DESDE EL PRINCIPIO

Lo intuía
pegado a mí,
envolviendo la punta de mis dedos
y esperando el momento de caer,
como caen las gotas de rocío en la mañana
y humedecerlo todo.

Hui,
cobardemente,
de ese miedo a mí misma
y a su esencia omnipresente,
deseando y temiendo
un encuentro que habría de producirse
de forma inevitable.

Imaginaba cosas:
luces de neón, humo en el aire,
multicolor palmera pirotécnica,
gritos y copas,
noche todo el tiempo
y la fascinación de lo elitista...
lejos...

Siempre lejos.

Muy lejos de mi casa.

Mas no era así...
todas las realidades fantaseadas
son piel y abrazo y lágrima
y el vello que se eriza
con la simple contemplación de la existencia

y ver pasar la tarde
degustando una jarra de cerveza
y sin más objetivos
que el de seguir viviendo.

Todo

ha estado aquí

desde el principio.

#SafeCreative Mina Cb

lunes, 24 de octubre de 2016

 
 
VOLVER A EMPEZAR

Ayer pasamos nuestras primeras horas juntos. No fue un gran comienzo, la verdad. Llovía a mares y permanecimos un buen rato en la entrada del lugar al que había ido a buscarle, yo mirándolo indecisa y él con ese aire ausente de quienes parecen no tener pasado.

Había quedado con unas amigas para preparar una excursión y la cita era ineludible. Cuando la concerté ya lo esperaba, pero como no conocía la fecha exacta de su llegada continué con mi vida sin darle más importancia a su existencia. Ya he rebasado esa edad del entusiasmo de la víspera, la verdad... y muy raro es que algo me quite el sueño a estas alturas. Así que lo mantuve a mi lado, inmóvil y callado, hasta que al fin la reunión se disolvió y llegamos a mi casa. Hice un poco de cena y nos fuimos al sofá, donde pasó lo que suele pasar en estos casos, esto es; yo lo miraba y él me contemplaba, iluminado e inquietante, agitándose un poco cada vez que yo tocaba ciertos puntos de su anatomía. Nos fuimos a la cama a descansar. No quise violentarlo con mis exigencias puesto que él no llevaba protección y temía que ocurriera un accidente.

Esta mañana me ha despertado. A las siete en punto, como le indiqué. Se me ha hecho rara esta presencia suya, tan distinta a la del resto: ese tacto frío y esa textura a la cual mis manos todavía no se han habituado. Claro que sé que pasará. Ya me ha ocurrido en otras ocasiones. En un par de semanas ni me acordaré del otro.

Es más: creo que hasta le voy a poner un tono de llamada diferente.

#SafeCreative Mina Cb

domingo, 23 de octubre de 2016

 
 
ME ENAMORO

Me enamoro...
A todas horas y de todo el mundo,
de rubias y morenos,
de blancos y mulatas,
de viejos y de niños...

Me enamoro de gestos,
de miradas,
de maneras de andar,
de formas de atusarse la melena,
de tatuajes, de bolsos,
de libros bajo el brazo,
de coquetos vaivenes de pestañas,
de veladas sonrisas,
de rostros agrisados por la pena...

Me enamoro de todo y todo el tiempo.

No sé...
puede que a mí
la fealdad me pase inadvertida.

#SafeCreative Mina Cb

sábado, 22 de octubre de 2016

 
 
PARADOJAS

Madera, olvido y piedra.
Soledad y guijarros.
Silencio y abandono.
Muros que se desmembran...

Y el brazo protector,
omnipresente,
de la insólita valla
de previsible pátina amarilla
y el poste, y el horrendo
funcional cableado de Iberdrola.

Nada es lo que parece.

#SafeCreative Mina Cb

viernes, 21 de octubre de 2016

 



FUGAZ

Un relámpago

¡Zas!
En plena calle

Una mirada cómplice
interrogante
mágica
fugaz

anónima

que sigue su camino...

¿Adónde irán las vidas
que se nos van quedando sin vivir?

#SafeCreative Mina Cb

jueves, 20 de octubre de 2016

 



EXTRAORDINARIO

Anoche
me acosté con la sonrisa que dejan en el alma
los proyectos de nuevas amistades

hoy
me ha despertado la noticia
de que algo extraordinario va a suceder,
en breve,
en la vida de un amigo

y una persona a la que quiero
como a una hermana
se ha casado hace un par de horas

Y justo cuando tenía la impresión
de que el corazón podía explotarme
de felicidad

ha sido el cacillo de la cafetera el que lo ha hecho

(explotar quiero decir,
en este caso
puede que a causa del desgaste de la goma)

Nada es perfecto.

#SafeCreative Mina Cb

miércoles, 19 de octubre de 2016

 


 LUCÍA
(Carta abierta a los asesinos de Lucía Pérez)

No puedo entenderlo. Francamente. No me entra en la cabeza. Por mucho que me lo intente imaginar. Por muco alcohol. O muchas drogas. O mucha ignorancia que medien en el acto. Utilizar a una mujer como un juguete. Forzarla. Sodomizarla. Penetrarla con un objeto hiriente. Producirle un dolor tal que hiciera que su corazón se detuviese. Quitarle a una chiquilla de dieciséis años las ganas de vivir. Por un capricho. Por un juego. Por un impulso animal que ni siquiera las bestias son capaces de satisfacer de esa manera.
Son muchas. Demasiadas. Muertas. Porque sí. Porque era mía. Por llevar minifalda. Por fumar droga. Por ir sola de noche. Por hacer autostop. Por coquetear con un desconocido. Siempre hay una excusa. Un móvil. Una justificación. Ser mujer es la más común de todas. Haber errado el código genético. Pertenecer al sexo débil. Ir provocando. Sonreír a quien no debe. Vestirse de tal o cual manera. Insinuarse a un hombre sin más propósito que el del antiquísimo juego de la seducción. Y a veces ni eso. Pasar por ahí. En el peor de los momentos. Cuando el macho en celo va puesto hasta las trancas y tiene que impresionar a la manada. La sucia mirada. El soez piropo. La falta de respeto. Y ese primer paso tras la presa. Y luego la carrera. Y al final la fiesta colectiva. La litrona y el coño a compartir. Que es cosa de hombres. Y el careto de sorpresa al comprobar que no respira. Y el resacón (yo no quería) del quince al día siguiente. Cuando uno sabe que le ha arrancado la vida a alguien. Decirte hijo de Satanás no sería justo. Hasta el diablo se avergonzaría de alguien como tú. Ojalá te pudras en la cárcel. Y luego en el infierno. Y que exista vida eterna para que tu padecimiento no tenga final. Y que ella lo contemple y no tenga piedad.
Del mismo modo que tú no la tuviste.

#SafeCreative Mina Cb

martes, 18 de octubre de 2016

 



CÓNCAVO Y CONVEXO

Es curioso cómo los cuerpos de ciertos espíritus afines se repelen y no encajan en el momento del contacto. Y no hay forma de hacer que eso funcione, como si la naturaleza intentase prevenirnos de que determinadas uniones no son recomendables o de que la mezcla de ciertas personalidades puede dar resultados explosivos, genéticamente hablando. Y es curioso cómo esa sensación nos invade desde el primer momento, desde ese beso inicial que, de no intuirlo, desencadena el mayor de los desastres. Y cuando digo desastre no hablo de asuntos del cronómetro o de los apetitos, sino de una especie de imposibilidad para el entendimiento mutuo, de un desacompasamiento, de una desproporción, de un desajuste que hace que uno atraviese el trance con la sensación de estar haciendo una chapuza y al llegar la mañana se avergüence de sí mismo como lo haría un adolescente en plena crisis.

Existen, por contra, cuerpos que se reconocen al instante y que se atraen de forma irreflexiva: que se adivinan y que entran en estado de ignición con el solo roce de las yemas de los dedos; que saben lo que el otro espera sin mediar palabra, que se funden de manera natural e irremediable y permanecen unidos incluso en la distancia: cuerpos que parecen hechos de la misma esencia y para los que el otro no tiene secretos: curvas en las que encajan otras curvas, manos que se entrelazan con destreza, bocas que pueden acoplarse de manera casi hermética y movimientos que siguen el compás al unísono, cóncavo y convexo, impulsados por una melodía que tan solo sus tímpanos pueden escuchar.

#SafeCreative Mina Cb

lunes, 17 de octubre de 2016

 


 CHAT

Un par de corazones se conectan
cada sábado noche en la distancia.

No han pedido una cita.
Sucede...
Como magia.

Él huye de un amor turbio y ajeno
al que detesta al tiempo que idolatra,
que nunca se adecua a su presente
y que debe ocultar de otras miradas.

Ella le dice adiós a cada instante
a aquel tren que partió de madrugada:
su alma en litera, lejos, muy muy lejos...
allí donde al amor le brotan llagas.

No han pedido una cita:
Se buscan sus palabras.

#SafeCreative Mina Cb
Imagen: J Miguel Jimenez Arcos

domingo, 16 de octubre de 2016

 



AHOGO

Las palabras que no deben decirse se clavan en el pecho,
pútridas y ahusadas
y provocan punzadas hacia afuera
y cortan el aliento
y hasta nublan la vista
y ponen en alerta a los sentidos.

El corazón
(pensamos)

Pero no:
es el alma que grita en nuestro nombre,
valerosa y enérgica,
irreductible paladín de la afrentada dignidad
que vomita soflamas
como esa de que a veces uno ha de matar
por no matarse.

#SafeCreative Mina Cb

sábado, 15 de octubre de 2016

 



INICIO

Descansas
anónimo e inerte
en tu plástico nicho.

Apagado
sin voz
y sin memoria.

Desmembrado y sin nombre
ni energía que nutra tus circuitos.

Esperando
como el arpa de Bécquer
el hálito de vida
que te insuflen la toma de corriente
y el botón de encendido
y esas primeras luces que se enciendan
y tu pantalla plana
llenándose de iconos:
inevitable inicio de todas las historias
que prometen llegar
a ser inolvidables.

Hoy tan solo metal,
y en unos días
palabra, confidencia,
momentos compartidos,
imágenes robadas al presente
que han de quedar grabadas
en tus prosaicas tripas.

Serás letra y sonido,
melodía,
sonrisa y emoción, voces lejanas
que la ciencia aproxima.

Serás besos pintados y canciones
suspendidas del aire
que surcarán los mares en segundos.

Serás consuelo amigo
en las interminables noches de tormenta,
secretos revelados al vacío
en ese gris momento
en que el miedo precisa desnudarse
sin ojos que lo miren.

Serás alma gemela,
leal sombra metálica perenne
que seguirá mis pasos
hasta que el tiempo apague tus neuronas...

O me canse de ti
y te cambie por otro más moderno.

#SafeCreative Mina Cb

viernes, 14 de octubre de 2016

 


LICENCIA PARA INSULTAR

Algo tiene una tienda. No sé que es pero algo tiene. Es como una especie de ring, un cuadrilátero acolchado adonde la peña puede ir a darle de ostias al dependiente como si fuera un puching-ball sin que el otro pestañee. Tú puedes haber tenido un mal día en casa, en el curro, en la uni... no importa. Seguro que cuando salgas hay abierto un super, un bar, un chino... al que puedes entrar y soltar la mala bilis. Por lo que sea, qué más da. Si vas con ganas encuentras una excusa fijo. Que está oscuro. Que hace frío. Que no tienen cambios. Que no te gusta el careto de la dependienta. Que llueve en la calle. Que ha estallado una bomba en Katmandú. Cualquier motivo es bueno, zas, para montar en cólera y cargar contra el currela. Como tu jefe, tu pareja, tu profe han cargado contigo. Por cruzarse en tu camino en esa hora, en plan Clint Eastwood con lo de alégrame el día. Por estar ahí, aguantando marea para que le paguen una mierda. Por currar cuando tú ya has terminado la jornada. Por sonreírte y saludarte cuando entras.

Por existir, qué diablos.

Es sencillo. Uno llega, da cuatro pasos y la monta. Del quince y con mucha gente alrededor a ser posible. Humillando a la víctima además. Pero en plan estruendoso. Gritando y agitando bien los brazos. Con energía. Que al otro le quede muy clarito quién es el que manda. Con dos cojones, oye... que para eso le pagan. Para aguantar eso y más y permanecer callado, sereno e impertérrito mientras tú sueltas la mierda y te vas calmando poco a poco. Y el personal te mira con admiración y sin decir ni mu. Impresionando. Marcando estilo. Como debe ser. Que pare eso existe la inmunidad que te concede el uniforme del otro. O el mostrador. O esa chapita que lleva colgando con su nombre y su número de ficha. Para que puedas ningunearlo de manera personalizada. Y amenazarlo con quejarse de ti a tus superiores. Porque sabe quién eres. Te ha fichao. Y tú sin embargo no tienes ni puta idea de con quién te estás jugando las lentejas. Él es dios y tú el hijo de Abraham esperando la puñalada de su padre, cagándote en sus muertos y sin abrir la boca porque Santa Hipoteca es la que manda. Y no te queda otra que aguantar mientras la gente mira al suelo. Y al fin, cuando ya el otro se dirige a la salida tras haber vaciado sus pútridas entrañas, es cuando lo miras a los ojos y le escupes, bien alto y esgrimiendo la más cordial de tus sonrisas:

“Que tenga usted un buen día”

Y lo dejas a la altura del betún.

Garantizado.

#SafeCreative Mina Cb

jueves, 13 de octubre de 2016

 



MAGMA

Presencias
que arrancan sentimientos
y desgranan palabras
que olvidamos un día
adentro, muy adentro,
en el abismo de nosotros mismos
y que brotan, violentas,
como lava candente
para encontrarnos
y lanzarnos al futuro.

#SafeCreative Mina Cb

miércoles, 12 de octubre de 2016

 


Y TODOS CONTENTOS

Fue uno de esos accidentes tontos que no deberían suceder pero suceden. Paseaban por el rastro y a él lo abordó una pitonisa mientras su chico miraba un puesto de chaquetas. Le hizo gracia la cosa y la dejó leerle las líneas de la mano y decirle lo que te dicen siempre: que iba a prosperar en la vida, que se iba a casar con una mujer rica y que iba a ser padre de gemelos. Esto último lo soltó mientras el novio, que ya se había cansado de mirar chaquetas, aparecía por detrás y le daba a su pareja un sugerente beso el la mejilla, cosa que hizo que la pitonisa pusiera pies en polvorosa sin recoger siquiera los cinco euros que había pedido por su vaticinio.
Claro que al recién llegado, de natural celoso y gay desde la cuna, no le hizo mucha gracia lo de la mujer y los gemelos puesto que su pareja había descubierto su tendencia bisexual hacía poco. Y esa tontería desencadenó una agria discusión que terminó con la deserción del agraviado mientras Sergio, que así se llamaba el otro, iniciaba un patético peregrinaje por los bares de la zona, en uno de los cuales coincidió con una amiga que le doblaba la edad y aún le sobraban años y con la que tenía muy buen rollo desde hacía tiempo. Una cosa llevó a la otra y al cabo de más o menos quince Voll Damm ambos terminaron jugando al Graduado en el piso de la chica, lugar que Sergio abandonó al amanecer, avergonzado y resacoso, en cuanto vio en el whatsapp un mensaje de su amor diciéndole que se había portado como un imbécil y que por favor volviera.

Se casaron al cabo de unos meses. Nueve en concreto. Y casualmente cuando salían del juzgado la vieron a ella empujando un carrito de gemelos. Se acercaron para saludarla y la mujer enrojeció y bajó los ojos. Entre que iban tan ciegos que no usaron condones y que ella nunca había sido madre y además andaba con los desajustes de la menopausia, para cuando supo del embarazo ya no había forma de arreglar aquello. Y apechugó por no fastidiarle el plan a su querido amigo. Ellos, que se proponían lanzarse la aventura de la adopción en breve, le propusieron acogerlos en cuanto volvieran del viaje de novios y permitirle que los visitase o se los llevase a casa cuando le apeteciera, cosa que le pareció estupenda porque aquello ya la había pillado muy mayor.

#SafeCreative Mina Cb

martes, 11 de octubre de 2016

 


 ESTADÍSTICA

Cuál es
el porcentaje de vigilia mínimo
que te ha de dedicar mi pensamiento
antes de que se activen las alarmas
que anuncien
que estás colonizando mi cerebro.

#SafeCreative Mina Cb

domingo, 9 de octubre de 2016

 


 EXACTAMENTE

Alguien capaz

de leer tus ideas entre líneas,
de adivinarte a través del pensamiento,
de escuchar a distancia tus silencios,
de interpretar los alaridos de tu alma,
de abarcar con tu cuerpo la galaxia

sin que nada se altere
ni transforme su esencia.

Amor puede llamarse
aunque no tenga nombre.

#SafeCreative Mina Cb
Imagen: Chagall

sábado, 8 de octubre de 2016

 



DE NO RETORNO

Ese momento
en el que tomas conciencia

de que te estás
acercando al fuego

más

de lo razonable



Pero te da lo mismo.

#SafeCreative Mina Cb

viernes, 7 de octubre de 2016

 


 ADRENALINA

Tengo la sensación de no vivir en serio.

Apenas limpio,
me alimento lo justo y no me importan
las banales cuestiones
que inquietan al común de los mortales...

(Mortales... ¡Qué palabra!)

Me veo extraño,
ajeno, intemporal,
un Peter Pan perdido en un parque de atracciones
que le aburre
de puro conocido.

Adrenalina:
esa palabra mítica
que suena a alucinógenos
y a lúgubres entornos
y a luces que el cerebro descompone
como el prisma de Newton
o la mítica portada de Pink Floyd.

Me entrego a los placeres del insomnio
y el reloj gira y gira
lo mismo que lo hacía la cabeza
de Linda Blair
mientras yo permanezco
estanco, inconmovible,
encerrado en el gris de mi materia,
de mi intelecto raro y siniestroide,
del turbio abismo del reverso tenebroso...

Anónimo y absorto
mientras gira el tiovivo
y las bocinas suenan.

#SafeCreative Mina Cb

jueves, 6 de octubre de 2016

 



CAPICÚA

Haces
que a un tiempo

olvide
que no me queda mucho

compruebe
que no he perdido tanto

confirme
que ha valido la pena

#SafeCreative Mina Cb

miércoles, 5 de octubre de 2016

 



¡PROHIBICIONES A MÍ!

Este tipo de avisos deberían considerarse atenuantes en los juicios por temeridad. Y es que, vamos a ver, si el edificio amenaza ruina y está ahí, cayéndose a pedazos sin más, con los muros grafiteados y algún que otro corazón caduco, no pasa nada... o sea la peña va a circular sin más problema. Como mucho se pararán delante para hacerle una foto y aquí paz y después gloria. A seguir con el paseo y a buscar un merendero donde dar cuenta del bocata y el refresco. Y luego vuelta a casa y a dormir que mañana es día de escuela. Un domingo más.
Pero como haya un aviso, una prohibición, una recomendación del tipo que sea, ya la hemos liáo. Como ponga “No pasar” ya estamos para dentro sin perder un segundo. Y haciendo mucho ruido, para que se joda del todo la techumbre con la vibración. Y corriendo y saltando sin tener en cuenta la inestabilidad del firme. A lo nuestro. Que para eso somos inmortales. Y si nos pasa algo ya nos llevarán al hospital. Pero antes nos haremos la foto con el móvil, medio cuerpo bajo los escombros y sonriendo al objetivo como imbéciles. Y para cuando llegue el 112 ya lo habremos colgado en Instagram. Para que a nadie le quepa duda de que somos gilipollas.

Y es que no hay como prohibir. Eso o desafiar. Entre el “A que no hay”, el “Ni se te ocurra” y el “Malo será que...” están los cementerios que ya no cabe un irresponsable más. Claro que para compensar existe el “Tú tranquila que la saco a tiempo”

Que al menos nivela un poquitín la situación.

#SafeCreative Mina Cb
Imagen de Tantos Jose Antonio Tantos Montejo

martes, 4 de octubre de 2016

 


 SOCIA ABISMO

Pedro Sánchez en pololos
y el PSOE en el barranco.
Lo que no logró ni Franco
lo han conseguido ellos solos.

#SafeCreative Mina Cb
Imagen de Isidro Gil

lunes, 3 de octubre de 2016

 


 DIVINO TESORO

No tengas prisa por morir.
Hay vida más allá
de esa patraña adolescente
que vomitan las vallas publicitarias por la calle
o escupen las pantallas de los aparatos electrónicos.

No tengas prisa
por llevar hasta el nicho tus dudas y zozobras y huir,
como un cobarde,
al otro lado
dejándote el futuro en mi mochila.

No tengas prisa
por escapar de lo que no conoces,
y supones
sórdido,
gris,
insoportable
triste...

estéril y carente de preguntas
o emociones.

No tengas prisa,
insisto,
por morir

pues simplemente basta
con negarse a vivir entre cadáveres.

#SafeCreative Mina Cb

domingo, 2 de octubre de 2016

 



PARECE NORMAL

Parece normal. Quiero decir como todo el mundo. Lo que viene a ser alguien que te cruzas por la calle y en quien no reparas. Del montón además. O sea no en plan George Clooney ni el feo de los hermanos Calatrava. Uno más de los que andan por el mundo, comen, curran y llevan al colegio a los críos.

Pero no es como todos. Ni de lejos. Al menos como yo. Ni como la mayoría de la gente que conozco. Que a lo mejor es porque él y yo no nos movemos en el mismo ambiente. Esto es, que yo no soy de las que se apuntan a todo bombardeo solidario. Solamente a algunos. A los que puedo y no me suponen un enorme esfuerzo. Y no me obligan a renunciar a otras ocupaciones. Como una gran parte de los mortales, creo. Solidarios de andar por casa. De guatiné y pantuflas. De mira qué pena pero hay que joderse lo bien que estoy en el sofá. De los que meten unos euros a una cuenta cuando pasa algo gordo. O algo muy gordo. O algo gordísimo. Como un terremoto o un tsunami o una calamidad de esas que dejan a cientos de personas en la calle. Que están muy lejos pero mira. Algo hay que hacer por ellos. Y no nos damos cuenta de que aquí también hay gente de esa. De la que está en la calle digo. En fin... sí que nos damos cuenta, pero es como si formasen parte del paisaje urbano. Están ahí. Cada día. Cada cual en su esquina con su recipiente y un cartel escrito a mano que intenta resumir en una frase la historia de una vida. Para nosotros son sólo vagabundos. Alcohólicos. Gentes de mala vida. Pero hay quienes los ven de otra manera.

Él es uno de ellos. Los conoce. Conoce sus nombres y a menudo sus historias y en ocasiones te cuenta cuentos de los que no se deberían escribir. Y de los que cualquiera puede ser protagonista.
David lo sabía. Que los miramos raro. Como a bichos raros quiero decir. Lo sabía y quiso luchar por ellos. Por devolverlos al mundo de la dignidad. Yo conozco personalmente a algunos de ellos. Los oyes hablar y te preguntas cómo ha sido. En qué momento terminaron en la calle. Cuál fue la noche en la que durmieron al sereno por primera vez. Y en qué se convirtió su vida desde entonces.

Me contó una de estas historias hace poco. Una tarde en el Villa Javier, limpiando muebles. Me lo contó como el que cuenta la película que ha visto en el cine. Quitándole importancia. Me habló de esas personas que, me dijo, están “a punto de cruzar la línea”, de dormir en la calle y empezar el descenso hacia el anonimato. Y me dijo, él, que dedica una buena parte de su tiempo a mejorar la vida de estos hombres y mujeres, que a veces se sentía miserable cuando algún compañero, en uno de estos trances, se llevaba a su casa al vagabundo, dejándole las llaves en la cómoda a la mañana siguiente cuando se levantaba para marcharse a trabajar. Me lo dijo casi avergonzado, como confesándome que no tenía agallas para llegar a más, que su generosidad era insuficiente. Y yo lo miré y miré a mi alrededor, ese local que había tomado forma en pocos meses, ese enorme trastero que por obra y gracia de la generosidad de cuatro locos se había convertido en un pulcro salón destinado a alimentar y devolver la dignidad a mucha gente, ese ambicioso proyecto llevado a cabo por un variopinto grupo de voluntarios que él había coordinado sin una sola queja, siempre conciliador y sonriente, siempre presente, siempre comprensivo, y me dije que si él se sentía miserable yo merecía, sin duda, un pasaporte VIP hacia el infierno.

Parece normal...

#SafeCreative Mina Cb

Dedicado a todos los integrantes del voluntariado de Villa Javier, por entregar su tiempo y su dedicación a un proyecto en el que todas las manos son imprescindibles. Especial mención a aquellos que hacen "más de lo razonable" y que nunca salen en las fotos. Que son muchos.

sábado, 1 de octubre de 2016

 


LA VERDADERA HISTORIA DE PINOCHO

Gepetto le sacudió suavemente para despertarle.
¿Has dormido bien, mi niño?- le preguntó.
Pinocho se desperezó ruidosamente, sus articulaciones emitiendo arbóreos crujidos mientras respondía:
-No sé, abuelo. Ha sido todo muy raro. Imagínate que he soñado que era de madera… De madera, ¿te das cuenta qué tontería? Y que había un hada buena que me convertía en niño de verdad. Como en los cuentos que tú me contabas de pequeño. En fin, menos mal que sólo ha sido un sueño. ¿Qué hay para desayunar?

Gepetto lo miraba sonriendo mientras el chaval engullía con ganas. Y es que al buen carpintero se le había ido la mano y en vez de un chiquillo había tallado un adolescente de 16 años que comía como una lima, un mozalbete atlético y bastante guapetón a su juicio. Lástima de ese nudo de la madera que no pudo eliminar completamente y que le había dejado esa nariz tan fea.

Una vez terminado el desayuno, el anciano le entregó dos cosas: un grillo y una cartera. El grillo, le dijo, se llamaba Pepito y sería su guía. Y la cartera era para ira al colegio, donde sin duda lo convertirían en un hombre de provecho. Él ya había soñado con que Pinocho fuera abogado, o médico. O incluso, quién sabe, presidente de la nación.

¡Ay! Pero el mal nunca descansa y cuando el chaval llegó al cole se encontró con una profesora que le hacía morritos. Era pelirroja y simpatiquísima, y tenía las curvas de Sophia Loren y la mirada de Gina Lollobrigida. Pepito Grillo se dio cuenta de inmediato de que la espectacular hembra no era sino la acérrima enemiga del hada buena que había dotado de vida al muñeco y se aprestó a alertar a Pinocho.
-Ni se te ocurra escucharla- le dijo- Es la reencarnación del mal. Te llevará derecho a la perdición. Condenará tu alma y el pobre Gepetto morirá de la tristeza.

Pero Pinocho estaba ya atrapado entre las pestañas de la diosa. Y cuando ella le pidió que se quedara después de clase para darle unas lecciones particulares, al chaval se le pusieron los ojos como platos. Cogió al grillo, que ya lo tenía frito con tanta moralina, lo metió en un frasco con formol y lo llevó al laboratorio de la escuela.
Luego volvió al aula donde le esperaba la maestra, que debajo de la bata blanca llevaba un body negro y unas ligas rojas.

Y fue entonces cuando a Pinocho empezó a crecerle la nariz.

#SafeCreative Mina Cb