domingo, 28 de diciembre de 2025


 

MADRE MÍA

Buf, a ver por dónde empiezo que aún estoy atolondrada.

Os cuento: hace algo menos de diez años me eché un amiguete que acababa de salir de la escuela de interpretación de Zaragoza. Se había vuelto a Tudela tras los estudios y andaba un poco de un lado a otro, pergeñando proyectos, algunos de los cuales llegó a emprender con una fortuna regular, cosa que a mí me jodía porque el tío es bueno y además el tiempo me ha dado la razón.

El caso es que se nos ocurrió que podíamos montar una obra. O sea que yo la escribiera y luego nos ocupásemos de buscar pasta para la producción y la interpretásemos a medias. Yo me puse manos a la obra y en cuestión de un mes tenía un texto más o menos cerrado en el que desarrollaba una idea que a ambos nos pareció, aunque mal esté que yo lo diga, la bomba.

Porque era un argumento cojonudo.

Tocaba ponerse a buscar la forma de llevarla a escena y ahí también parecía que íbamos acertando, y ya estaba yo con los apuntes para ir cerrando el escrito cuando mi colega tuvo un enfrentamiento familiar y se largó a Zaragoza a trabajar de lo que fuera.

Y aquí me quedé yo, compuesta y sin actor, con un libreto en el cajón y una cara de boba que lo flipas. Y fue pasando el tiempo y a mi amigo las cosas le empezaron a ir bien y fue conociendo gente, digamos un poco influyente, y un día en que coincidimos le recordé el texto ese y él me dijo que había sido una pena no llevarlo a escena porque era genial. Yo insinué que quizás podríamos intentarlo de nuevo pero el chaval anda con dos montajes y la vida no le da para el tercero. Y entonces le pregunté si conocía a algún productor y me facilitó varios contactos.

“Tú diles, que el no ya sabes que lo tienes”. Y me lie a mandar una sinopsis (que no el guion) y el currículum a varias de esas direcciones y hace una semana, cuando ya ni me acordaba, el teléfono sonó. Un gestor estaba interesado en mi trabajo y me pedía el texto. Llamé a mi amigo por ver si podía ser un fraude que buscase levantarme la idea y el flipó:

“Es uno de los mejores del país, tía. Vaya suerte has tenido. Mándalo que esa gente es de fiar”.

Así que lo mandé. Y al cabo de unos días se pusieron en contacto conmigo para exponerme las condiciones del contrato y me dijeron que van a montar mi obra…

¡¡En Madrid!!

Se estrenará seguramente en marzo.

Se titula “Madre mía”.

#SafeCreative Mina Cb 

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