Y TÚ… ¿CUÁNDO COGES VACACIONES?

Es la frase del mes. La de hace quince días era “Felices fiestas”, la de dentro de cuatro meses será “Feliz Navidad” y la de estas semanas es esa:

“¿Cuándo coges vacaciones?”

Que en realidad es una forma de decirte “chincha rabiña que yo estoy disfrutándolas”. Y te lo quiero refrotar por la nariz al ver cómo languideces en tu puesto de trabajo. Y al principio contestas, por educación, pero luego ya cierras la boca porque lo que viene luego es una descripción de todo lo que van a hacer. Relato que irá acompañado de un fruncimiento de morrito conmiserativo ya que tú vas a pasar agosto el pie del cañón.

Bueno, lo mismo que pasaste julio. Y lo de que se van (o se han ido) de veraneo no lo desconoces porque se han hartado de compartirlo en Instagram, que no te explicas cómo no se han encontrado la casa ocupada a su regreso. Lo que no saben, porque te lo callas, es que tú en otoño andarás, pongo por caso, paseando en bolas por una cala almeriense o tapeando por los mesones de Segovia cuando ellos estén jodidos en la nave, en la oficina o en el aula con un montón de enanos. Y que vas a pagar la cuarta parte porque tú lo vales. Y lo prefieres. Y lo eliges. Eso y no quemarte como una gamba en una playa abarrotada del Levante, o echar horas y horas en el coche tragando caravanas. O visitar monumentos en olor de multitudes. O ciscarte en lo más barrido por no poder pegar ojo por las noches a causa del calor y las verbenas.

Y es que la envidia es muy mala y a algunas no nos gusta provocarla.

#SafeCreative Mina Cb