VETE ACOSTUMBRANDO
No hay nadie más importante que uno mismo.
La vida va muy rápida.
No hay tiempo que perder
y quien tropieza
a menudo se queda en el camino.
Llorar está mal visto,
Es un penoso síntoma de debilidad
que debe reprimirse.
Debes tragar las lágrimas,
respirar hondo
y seguir...
hasta el momento en que el salado líquido
te encharque los pulmones
y te empantane el alma.
Así es el mundo, niña,
así es el mundo.
Hazte a la idea...
Vete acostumbrando.
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