lunes, 18 de diciembre de 2023


 

FANTASÍAS ANIMADAS DE AYER Y HOY
(cuento con moraleja)

(urgencias del hospi)

- ¡Señor cirujano! ¡Emergencia, emergencia!
- ¿Qué me traes?
- Pues uno que acaba de tener un accidente. Que ha sido aquí al lado y viene con medio intestino fuera el pobre, y además fatal porque ha tenido que hacer un tramo del camino a pie.
- ¿Y no ha llamado a la ambulancia?
- Sí, pero cuando han llegado han dicho que no lo querían traer y cuando iba por la cuneta lo ha recogido un señor de Murcia que no lo conocía de nada y que es quien lo ha entrado hasta admisión.
- Pues menuda falta de profesionalidad. Luego miro los datos de los conductores y les va a caer un paquete de flipar. Es inadmisible.
- Si han dicho que ya lo sabían pero que ellos no traían a este paciente. Que les cae fatal.
- Ya, pero es que no se pueden poner antipatías personales por encima del deber profesional. Aquí se atiente a todo el mundo. Somos un estamento público. Hay un código deontológico. Si al de la ambulancia no le cae bien el accidentado pues que no lo mire y se acabó. En fin, a lo que vamos, páseme la ficha de triaje.
- Es que en triaje tampoco han querido verlo. A la médico de guardia le caía gordo. Así que lo he montado en una silla y lo he traído yo por mi cuenta. Me da tanta penica…
- Pero eso es saltarse el protocolo. Y lo de la médico de triaje es inadmisible.
- Sí, ya sé, pero es que si no se nos hubiera muerto en la sala de espera, usted no sabe cómo viene.
- Pues nada hágalo pasar. Madre mía ¿cómo es posible que esta urgencia no haya sido atendida en admisión? Perooooo…. ¿Este no es…?
- Sí, señor doctor. Es. Abelardo Loquero. Lo pone en la documentación. Pulserita no lleva que ya le digo que nadie lo ha querido atender. Me he cruzado por el pasillo con el anestesista y me dice que él no le pincha, que lo operen en vivo y que se joda.
- Pues no sé cómo lo verá pero yo a este tío no lo opero.
- ¿Cómooo? ¿Pero no acaba de hablar de profesionalidad y de códigos deontológicos?
- Sí, sí… Pero es que cuando yo era pequeño me dio una pedrada en la cabeza. Aposta además. Menudo era ya por aquel entonces…
- Pero oiga… han pasado un montón de años y usted es cirujano y él es un paciente que necesita una intervención.
- Ya, ya… pero es que lo de la pedrada no se me olvida. En fin, que yo a este tío no lo opero. Llamad a otro.
- Pero es que son las tres de la mañana y usted es el cirujano de guardia y si llamamos a otro entre que viene o no viene se nos ha muerto el paciente.
- ¡Ah… se siente! Yo no lo pienso operar. Una pedrada es una pedrada aunque hayan pasado mil años. La brecha se cierra pero la dignidad no se recupera. Que le den. Me voy a echar un cafelito ¿Te vienes?

#SafeCreative Mina Cb

Moraleja: Cuando alguien ocupa un cargo de responsabilidad no puede tener ni amigos ni enemigos. Y cuanto más alto sea ese cargo más importante es mantener la neutralidad. Por difícil que pueda resultar a veces. Y es importante porque dejarse llevar por simpatías o antipatías personales puede tener consecuencias gravísimas, como se ha podido observar a lo largo de la historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario