LUQUI
Era la voz de los 40 principales cuando la cadena, creo, aun no se había inventado y el mozarrón repasaba la lista los sábados y domingos en “El gran musical”, esa fórmula radiofónica que tenía su revista y sus conciertos propios, al aire libre y en Madrid, como aquel desgraciadamente célebre en el que perdió la vida una muchacha durante la avalancha que tuvo lugar durante una actuación de los Pecos. Por aquellos tiempos los locutores eran intrigantes galanes sin rostro a los que una se podía imaginar lo mismo que se imaginaba a los protagonistas de las buenas novelas, y es quizá por eso que sufrí una tremenda decepción el día en que un medio gráfico (tal vez la misma revista citada anteriormente) me puso ante los ojos la imagen de un tipo de alborotada y canosa pelambrera que más se asemejaba a un discípulo de Einstein que al conductor de una exitosa corriente radiofónica.
Joaquín Luqui era melómano y superfan. De la música, de los discos y de todos los grupos. Especialmente de los Beatles y de Paul. Los veneraba, y me imagino que la gozaría bien al tropezarse con John por los pasillos de la eternidad. Le diría que menuda faena la de Chapman, porque él en el fondo deseaba que se volvieran a juntar. Y le contaría que le encantaba el Imagine. Y que pensaba que su banda había sido lo mejor que le pasó a la historia de la música. Y ya, después, se hubiesen puesto a hablar del concierto aquel en Madrid cuando Franco estaba vivo, y de la era hippy y los yeyés. Y del Sargento Peppers y de la foto del paso de cebra de Abbey Road.
Luqui, que no era de Londres ni de Manhatan sino de Caparroso, se fue hace un par de décadas de una forma muy tonta y muy discreta cuando esto del Feisbu no existía. Y la noticia de su muerte se diluyó lo mismo que un azucarillo en el café caliente. Por eso, este finde que acaba de pasar, sus compañeros de la SER le han hecho una fiesta retransmitiendo el programa “Del 40 al 1” desde su pueblo natal. Y por eso yo también quiero rendir mi pequeño homenaje personal a este navarrico vital y campechano que inventó un lenguaje propio y a través del que aprendí, hace un montón de años, lo importante que es amar la música.
#SafeCreative Mina Cb
Cuentos, poemas, historias... Soy Inma y os propongo que hagamos un club de cuentistas. Con imaginación. Con ilusión. Con esperanza. Un club donde pasar el tiempo, donde evadirse... Donde jugar a ser otro.
lunes, 31 de marzo de 2025
domingo, 30 de marzo de 2025
CARICIA
Se puede acariciar de muchas formas:
Con las manos
sin más,
básicamente
o bien dejando que las puntas de los dedos
vayan rozando al otro
imperceptiblemente casi
o usando la suave piel de las muñecas
o el dorso de las mismas.
Con los pies,
por ejemplo,
sensualmente,
deslizando la extremidad sobre la piel del otro
o también con las piernas
o incluso con los muslos
en un momento dado.
Se puede acariciar con la mirada,
impregnando la misma de ternura.
Se puede acariciar con la sonrisa y
(naturalmente)
por medio de los labios
aun sin que la caricia llegue a beso.
Se puede acariciar, bien lo sabemos,
con la lengua,
que hace cosquillas en lugares muy concretos
y es elemento íntimo y osado.
Se puede acariciar, aún en la boca
a través de un susurro,
o de un templado soplo
que recorra una zona puntualmente sensible.
Y se puede
(sabedlo)
acariciar
(como a veces me gusta hacer contigo)
a través de las líneas de un poema.
#SafeCreative Mina Cb
sábado, 29 de marzo de 2025
viernes, 28 de marzo de 2025
TRANQUILA, CARIÑO... LA MILI SOLO DURA UN AÑO
¿Alguien se acuerda de la mili?
¡Síiiiiiiii!
Ese secuestro legal que duraba un año, y que permitía a tu jefe (en caso de que estuviera harto de ti) aprovechar la circunstancia para contratar a alguien que te sustituyera y a tu vuelta decirte eso de: “Mira-oye-que-mientras-no-estabas-hemos-comprado-unas-maquinitas-nuevas-y-ahora-ya-no-nos-haces-falta-así-que-a-tomar-por-saco”.
Las chicas no hacíamos la mili, no…
Hacíamos algo muchíííísimo peor:
Escuchar, aburridas, las batallitas de los chicos que SÍ hacían la mili.
Sí, porque si hasta los 20 años las conversaciones de los tíos giraban, por lo general, en torno a los coches, los automóviles y los vehículos, en el momento que les rapaban la cabeza y les colocaban el uniforme ya solo se hablaba de guardias, imaginarias y sargentos chusqueros. De este modo, el fin de semana del permiso se convertía en una tortura.
Tú te pegabas todo el mes esperando el momento de ver a tu chico y, una vez que llegaba: ¿Qué hacía? ¿Invitarte a cenar al restaurante más romántico de la ciudad y después sobornar a su amigo el independizado para que le dejase una noche el apartamento, llevarte allí y hacerte el amor hasta que cayeses desmayada de placer?
¡Noooooooooooo!
Lo que hacía era quedar con unos colegas (y sus aburridííísimas novias) en una cafetería con la tele bien grande para ver el Madrid-Barça, comerse una hamburguesa, hincharse a birras y hablar de la mili con sus amigotes mientras que tú soportabas como podías la delirante conversación de las aspirantes a señora de Tal, que aprovechaban los doce meses que duraba el servicio militar del susodicho para quedar e irse de tiendas; de tiendas de muebles, de tiendas de sábanas, de tiendas de vestidos de novia….
De modo que cuando terminaba el partido y tu chico te metía en el coche para llevarte a algún sitio oscuro con la intención de echar un rápido y gélido polvo entre eructo y eructo (una hamburguesa y 10 ó 12 birras unidas a tres o cuatro horas en la misma silla dejan el estómago un tanto desajustado…), tú decidías vengarte dándole donde más le dolía….
Nada de sexo.
- Llevas toda la noche hablando de mili, y a mí me has dejado ahí con esa cuadrilla de marujas, que me he aburrido como una ostra ¿Y ahora te mosqueas porque no quiero sexo?
- Pero cariño, entiéndelo, son mis amigos, llevaba un mes sin verlos (mentira, la mitad estaban haciendo la mili en la misma ciudad pero en diferentes cuarteles y te constaba que se veían casi a diario para emborracharse, y algunos -tú siempre confiabas en que no tu chico- incluso para ir de putas)- te decía, señalando el bulto del pantalón y mirándote como el lobo disfrazado de abuelita miraba a Caperucita desde la cama.
Y tú…
- Que no, que no tengo ganas… y además aquí hace mucho frío. Llévame a casa.
Y de ese modo se acababa el fin de semana romántico.
Y el del mes siguiente resultaba ser igual.
O peor.
Hasta que un día, aburrida de ver catálogos de Pronovias, le echaste un vistazo distraído a la pantalla. No estaba mal aquello del fútbol, no. Sobre todo después de lo del huevo del Buitre.
Y pasaste de la manga abullonada al penalty, del escote palabra de honor al fuera de juego, del salón isabelino al córner, de Vittorio y Lucchino a Michel y Butragueño, del blanco roto al blanco merengue, del "Pronto" al "Marca", de Mª Teresa Campos a José Mª García…
En fin; que acabaste haciéndote forofa. Tanto que quedabas con uno de los amigos de tu novio (el excedente de cupo) para ver los partidos de la Champions, que eran entre semana. Y como a él, aparte del fútbol, le gustaba el tecno como a ti (tu novio lo aborrecía), los días en que no había partido os ibais a su casa a escuchar a los Depeche Mode y claro, una cosa llevó a la otra y en fin, la noche del España Malta os fuisteis por ahí a celebrarlo y...
La vez siguiente que tu novio vino de permiso, su amigo del alma el excedente de cupo y tú decidisteis citarlo en un bar tranquilito, pedirle un gintonic bien cargado, sentaos frente a él y...
- Oye, Javi -balbució el excedente: - ¿Te acuerdas hace seis meses, cuando te fuiste a Madrid, a la mili, que me pediste que cuidase de tu novia?
Tu todavía novio asintió, los ojos bajos, oliéndose la tostada.
- Bueno, pues… - siguió el fan de los Depeche- Esssssssssto…. El otro día…. En fin…. Ella estaba triste… Te echaba de menos…. Me llamó…. Se echó a llorar…. Intenté consolarla… Seguía llorando…. Le puse la mano en el hombro…. Seguía llorando…. La abracé…. Seguía llorando…. En fin, que al final le pasé la mano por la mejilla para secarle las lágrimas… Estaba tan cerca… Y es tan guapa. Por cierto, tío, que tu jefe me llamó el otro día. Necesitan a alguien para cubrir tu puesto. Sólo hasta que vuelvas. Y el contrato en el taller se me acaba la semana que viene. Y no me renuevan porque el dueño se jubila. Y necesito el curro, porque, en fin, no estamos seguros todavía pero…. A ella no le viene la regla… No te importa, ¿verdad, tío? Es sólo hasta que vuelvas. Lo del trabajo digo.
#SafeCreative Mina Cb
Del blog “Bridget Jones era anglosajona y, además, de mentira”
jueves, 27 de marzo de 2025
GOLONDRINAS
Se va esfumando marzo piano piano
tras haber esparcido lluvias mil
y asoma tras la puerta el mes de abril
primaveral, fragante y más liviano,
saludando a las flores con la mano.
Pintan el cielo nubes blanquecinas
y el sol dibuja chispas ambarinas
sobre un río que aumenta de caudal.
Se aleja por el norte el temporal.
Ya están en la ciudad de las golondrinas.
#SafeCreative Mina Cb
miércoles, 26 de marzo de 2025
IZQUIERDA
Yo quiero que la izquierda sea honesta,
sólida, receptiva, convincente,
comprometida, sobria, transparente,
resolutiva, unida y bien dispuesta.
Que dé a cada pregunta una respuesta
y lo haga de manera coherente,
que admita la tendencia diferente
y no tienda, si gana, a echar la siesta.
Yo quiero que gobiernen los mejores
y no aquellos que abrazan la doctrina,
se quitan del camino a detractores
y acaban por viajar en limusina
mientras reniegan de los dictadores.
Porque eso es progresismo de oficina.
#SafeCreative Mina Cb
martes, 25 de marzo de 2025
lunes, 24 de marzo de 2025
AVENTURA BASURERA
Esquivo contenedor
de la zona del Liceo:
¡Cambiar de sitio está feo!
Echa el freno, por favor
y trátame con amor
porque con tanto paseo
que me impone tu meneo
mis nervios van a peor.
Despistada romería
con la bolsa de basura
para seguir cada día
tu alocada travesura.
O cesa la tontería
o acabo en la sepultura.
#SafeCreative Mina Cb
domingo, 23 de marzo de 2025
ESPEJISMO
Joder, no podía creer que se le estuviera acercando. Tenía que dirigirse hacia otra parte. Pero no. Iba hacia él. Bien derechita y con la determinación pintada en el semblante. Llevaba toda la noche mirándola, acodado al otro lado de la barra, pero sin atreverse a abordarla, que las cosas ya no son tan fáciles como antes con lo del feminismo y él era más bien tímido. Le llamó la atención al entrar por su aire decidido y su mirada vidriosa, como de haber llorado, lo cual le otorgaba un cierto viso de indefensión que a él le ponía. Y luego la amiga. Que la escuchaba hablar sin poder retener algún bostezo. Y sus colegas de la despedida de soltero que iban hasta arriba y él hacía ya rato que se hartó de beber y los dejó a su bola, bailando hasta el himno nacional en esa pista que habían improvisado retirando las mesas, que por poco los mata el camarero.
De verdad que estoy harta. Pero harta ¿eh? Hasta el coño me tiene con sus tonterías. Hoy me ha dicho que quería que le enseñase el teléfono. El teléfono, tía. Que no se fía dice. Y cuando ha visto que iba hacia la puerta me ha dicho que con quién le iba a poner los cuernos. Yo, tía, que le he sido megafiel a ese cabrón. Que no he sido capaz de mirar a otro desde que le conocí. Y entonces me he vuelto para encararme y ha sido él quien se ha largado dando un buen portazo. Oye, que si tienes sueño te vas para tu casa, pero no bosteces, que parece que te importa una mierda lo que digo. Y tú, chaval, ponme otro wiski… o mejor deja la botella. Pues eso, tía, que ya no aguanto más. Que mañana cojo mis cosas y me largo. Pero deja de bostezar, ostia. Oye, mira ¿sabes qué te digo? Que te largues que yo le voy a dar a este cabrón motivos para que tenga celos, pero de verdad. Camarero, te dejo 30 pavos y me llevo la botella.
#SafeCreative Mina Cb
Imagen: Yuval Robichek
viernes, 21 de marzo de 2025
COSCOLÍN
Se inauguró Coscolín
después de tanto trajín
de máquinas y de obreros,
de arquitectos pintureros
visitando a los currantes
con sus zapatos brillantes.
Se inauguró un nuevo barrio
dentro de este vecindario
variopinto y popular
en donde se oye cantar
por la noche a los gitanos,
la guitarra entre las manos.
Se inauguró, ya era hora,
me decía una señora
esa plazuela arbolada,
céntrica y azulejada
que ojalá llene algún día
la nueva chavalería.
Se inauguró, y ya termino,
ese rincón tan divino
al que le falta un detalle:
(perdonad que no me calle)
ponerle terraza al bar
para ir a socializar.
#SafeCreative Mina Cb