lunes, 11 de abril de 2022


 

DE RETIRO

De entre de mis amigas
hay dos que me han dicho
que en Semana Santa
se van de retiro.

En una lo encuentro
bastante normal
puesto que la chica
es muy espiritual

y aunque ni es de dioses
ni de ir a la iglesia
se escapa del mundo
con cierta frecuencia.

La otra, sin embargo,
me choca un montón
porque yo la encuentro
bastante pendón

y encima me dice
toda emocionada:
“¡Qué cosa tan chupi!
Me muero de ganas.”

No van ambas mozas
al mismo lugar
más poco difieren
en la actividad.

Se trata, me cuentan,
de una disciplina
que tiene por meta
hallarse a sí misma

yéndose a una casa
que siempre está lejos
tras haber soltado
unos cuantos euros

para que te dejen
sin ordenador,
sin móvil, sin tele
y hasta sin reloj

y con la nevera
repleta de endivias
de agua embotellada
y de otras delicias

que van desde el verde
hasta el amarillo
y que has de comerte
sin ningún aliño

y puedas, inmersa
en tal sobriedad
llegar hasta el fondo
de tu identidad,

dando así respuesta
a aquellas cuestiones
que no resolvían
ni tus profesores

y volver a casa
tres días después
sin tener ni idea
de quién puedes ser

y atracando el frigo
nada más entrar
para, de inmediato,
llegarte hasta el bar

y echarte al coleto
tres o cuatro cañas
mientras te meriendas
un cuenco de rabas

diciéndole al barman
que mira, en la esquina:
“Ni retiros ni ostias…
¡Esto sí que es vida!”

#SafeCreative Mina Cb

No hay comentarios:

Publicar un comentario