martes, 17 de octubre de 2023


 

ENAMORARSE

El otro día hablaba con una amiga del amor. O más bien de enamorarse, que me da que no es lo mismo. Porque el amor es un sentimiento universal y lo de enamorarse es algo más específico. Y quizá por ello más complejo.

Y es que cada cual tiene su forma. De enamorarse digo. Su forma y su filosofía. Para una de mis amigas, por ejemplo, el amor es una decisión. Algo que se asume, se acepta y se vive. Y que se deja ir llevado por la vida. Para bien o para mal. En el caso de otras es un impulso visceral que parte de la ingle y luego va abarcando todo lo demás, de modo que sin atracción no hay nada. Pero para otras, sin embargo, es una relación en la que lo carnal es secundario y la ternura ocupa un lugar predominante. Y luego están las que consideran que enamorarse es un proceso voluntario que precisa de paciencia y comprensión donde las prisas nunca son recomendables. Y desde luego, no puedo olvidar a aquéllas para las que tener una pareja es tan necesario como respirar y que debido a ello no pueden vivir sin el amor. Y luego estamos las cuatro locas del coño que lo queremos todo pero al mismo tiempo no queremos nada: o sea que anhelamos atracción, ternura, comprensión y mucho espacio. Libre quiero decir. Mucho espacio para hacer lo que nos dé la gana (que no forzosamente ha de ser follar con otros) pero sabiendo que existe un rinconcito en el que refugiarnos de la vida. Un lugar donde siempre encontraremos unos brazos entre los que desaparecer del mundo sin necesidad de andar con broncas o capitulaciones. Porque, como dice mi amiga Ana, hacer feliz a alguien conlleva una responsabilidad enorme, ya que se supone que cada cual debe ser capaz de ser feliz sin necesitar a otra persona.

Pd: Seguro que ya lo habéis adivinado, pero Ana es de las mías.

#SafeCreative Mina Cb

No hay comentarios:

Publicar un comentario