miércoles, 16 de noviembre de 2022


 

(Tudela)
LA DE SIN RUIDO

Leyendo un poco al tuntún
las nuevas normas del ruido
veo que va a estar prohibido
lo que no lo estaba aún.

Y eso que ya era la criba
bastante fina al respecto
en cuanto a cualquier proyecto
que no viniera de “arriba”

y tenía el consistorio
en materia musical
más quemado al personal
que un mixto en un crematorio

pues su función era en sí
prohibir las actuaciones
y tocarles los cajones
a los músicos de aquí

y dar porculo, de paso,
a los pobres hosteleros
que arañaban los dineros
poniendo acordes al vaso.

Pero al loro, que el okey
no supone un gran problema
cuando se trata del tema
de una fiesta con Dj

o de un nostálgico evento
con decibelios a mil
que monta cualquier edil
de muylustreayuntamiento

y que te tiene despierto
hasta las tres menos viente
y a la mañana siguiente
vas al curro medio muerto.

Y eso por no mencionar
las pías semanas santas
con bombos hasta las tantas
y trompetas sin parar

o las fiestas patronales
con sus peñas, sus gaiteros,
sus cohetes, sus joteros
y sus cantos fraternales,

y luego la exaltación
de la verdura, festejo
que convierte el casco viejo
en ruidoso botellón.

Todas ellas populares
y por ello permitidas,
auspiciadas y vendidas
como eventos singulares

donde el estruendo no existe
o, si existe, se consiente
pues es parte del “ambiente”,
como el consumo de “alpiste”.

Pero ay de ti si te pilla
tocando un municipal
la guitarra en tu portal
sentadico en una silla,

que incluso si estás sonando
como el mismo Camarón
te expones a una sanción
que te dejará temblando.

Tudela la de sin ruido,
la que aspira a capital:
un desierto cultural
donde todo está prohibido.

#‎SafeCreative‬ Mina Cb 

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