jueves, 19 de mayo de 2022


 

CUERPOESCOMBRO

De verdad, dejadlo ya. En serio. No es sexy ni guay ni atractivo ni nada. No impresiona, al menos para bien. O sea que no te dan ganas de ver más. Al contrario, yo me imagino ciertas zonas y me da mucho repelunco. Que me digo, como en ese sitio se le marquen las venas igual no voy a concentrarme, que se te escapa el diente y brota un surtidor que tienes que llamar al 112 y hacer un torniquete con el tanga mientras se presentan.

Dejad el gimnasio. Dejadlo, por favor. Olvidaos del entrenador y de los anabolizantes que ya lo dice el refrán, que lo poco gusta pero lo mucho cansa. Dejad lo de la musculación y todas esas mierdas que os estáis metiendo, que de puro turgentes casi da grima veros. Con esos brazos que ni Popeye el marino. Y luego la vena por encima del bícep, ahí aprisionada entre el músculo y la piel, que a la pobre no le tiene que llegar oxígeno. Que sois jóvenes pero el día menos pensado os da un infarto, que eso no tiene que ser bueno para la circulación, toda la sangre ahí, achuchurriada, que cada vez que levantéis la pesa y el músculo se ahúse la vena se tiene que escachar como una pajita de refresco cuando se queda pillada entre dos hielos.

Y los tatuajes. Dejad por caridad ya los tatuajes. O al menos tatuaros con cabeza, que no vais a tener siempre treinta años. Y que ese pecho toro, por mucho que les deis a las abdominales, no va a duráos siempre. Y que la única manera de que dure es pegarse la vida en el gimnasio. Y que ahora tenéis tiempo, pero luego no. Y además, que a vuestra edad es fácil que las cosas permanezcan en su sitio porque sí, pero que conforme pasa el tiempo todo se va cayendo y desinflando. Y las facturas y el curro no te permiten pegarte la vida en el gimnasio. Y las turgencias se desturgen y las firmezas se desfirman y las protuberancias se desprotuberan. Y ese pedazo de valquiria que te has tatuado en el antebrazo izquierdo se convierte, de la noche a la mañana, en la melliza bruja de Matusalén. Y la rosa de los vientos del pechamen en un clavel chuchurrio. Y el unicornio de la zona pélvica en…

¿Perdona? ¿De verdad hay algún musculitos capaz de tatuarse un unicornio al lado de la polla?

#SafeCreative Mina Cb

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