LA TEORÍA DE NAPOLEÓN
Dicen que a quien madruga Dios le ayuda pero la verdad es que a todas las personas que conozco, y entre las que me incluyo, hacerlo sólo nos ayuda a llegar a tiempo a trabajar, que no es algo que hagamos por gusto en la mayoría de los casos. Asimismo, se dice que Napoleón suscribía la falaz teoría de que dormir es una pérdida de tiempo ("para débiles", puntualizaba), pero ya veis para lo que le servía estar despierto; para invadir países y andar jodiéndole la vida al personal. Aunque a lo mejor lo que le pasaba al enano de Ajaccio (he dicho “enano”, señores/as/es/os/us” correctores de cuentos infantiles) era que padecía de insomnio y ya se sabe que los insomnes suelen tener bastante mal café. O bueno, que igual es por eso que no duermen.
El caso: que tú llegas una tarde a casa, reventada después de haberlo dado todo en el curro, con dolores en músculos que ni sabías que existían, congelada porque las noches de invierno es lo que tienen, más quemada que la pipa del Gran Toro Sentado de aguantar las chorradas de los clientes y con muy pocas ganas de que Napoleón o el refranero te toquen las narices, y después de darte una ducha, derrumbarte en el sofá, encender la tele y apagarla al instante, coges un libro, te metes en la cama (sola, eso es importante) y, cuando al cabo de un rato te das cuenta de que llevas diez minutos intentando leer la misma página, apagas la luz y te lanzas al vacío, ahí, sin despertador ni nada, con dos mantas, una buena almohada y todo un catálogo de sueños por delante. Y por tu mente desfilan tu madre, tu tía, dos hormigas, tu ex marido, el fantasma de tu gato y una infinidad de cosas más. Y mientras todo eso sucede, los músculos se alivian y dejan de doler. Y el cerebro se vacía de preocupaciones y no existe nada más que el disfrute de esa película que tu cabeza proyecta sólo para ti. Y cuando el proyector se para y asomas la cabeza por entre las sábanas puedes ver que es de día. Pero mucho además. Y que han pasado diez horas, casi doce, y que de cargo de conciencia nada de nada.
Y que desde luego no tienes ni putas ganas de invadir Polonia.
#SafeCreative Mina Cb
Cuentos, poemas, historias... Soy Inma y os propongo que hagamos un club de cuentistas. Con imaginación. Con ilusión. Con esperanza. Un club donde pasar el tiempo, donde evadirse... Donde jugar a ser otro.
viernes, 24 de febrero de 2023
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