Hoy no he llorado.

Igual que ayer.
Y que anteayer.

Y que los días,
las semanas,
los meses anteriores.

Y seguro que mañana

(pese a que trabajo,
y a no ser que acontezca un hecho infausto
o se me declare una conjuntivitis)

tampoco lloraré.

Y es porque nadie,
nada,
nunca,

no

merece demasiadas lágrimas.

#SafeCreative Mina Cb