jueves, 5 de enero de 2023


 

Queridos Reyes Magos:

Que sepáis que os recibo con todos los honores, ya no por albergar esperanzas de que podáis atender mis ruegos, sino porque Diciembre se me va haciendo cada vez más enojoso y me cuesta bien poco descolgar el calendario de la pared para poner el nuevo.

Este año no tengo mucho que pedir. Bueno, lo que más deseo lo sabéis pero no voy a escribirlo. Lo pido todos los años y parece que estoy destinada a que no llegue. En cuanto al resto, os agradecería que me sigáis conservando esta salud de hierro y que permitáis que continúe con esta tendencia al pasotismo que se va acrecentando en mí con el transcurso de los años. O sea, que las cosas insulsas me importen todavía menos que el año pasado, que ya es importarme poco. También os pido que me aguantéis el trabajo, que reconozco que tengo mucha suerte: cerca de casa, la jornada reducida, con ese equipazo y cobrando lo razonable. Y también que no se me desplome la casa, que a estos edificios de lo viejo ya se sabe, están siempre saliéndoles grietas por aquí y por allá. Y que no me cierren el bar del barrio, que si no a ver dónde voy a ir cuando estoy de bajón, que en esos casos el loro no me sirve. Y que no me abandonen las musas ni me vuelque la piragua sin llevar el chaleco salvavidas. Os pido también que por favor el anuncio de la bajada de precios del gobierno sea cierto, pero que no nos bajen una cosa para subirnos otra, que estos son así. Y que, ya que se han puesto con el tema de los alimentos, le metan mano también al asunto de las energías, que es una vergüenza que la gente pase frío en casa por miedo a encender la calefacción. También me gustaría que se acaben las guerras, que se encarcele a los tiranos y que estos mueran en las cárceles, que nadie pase hambre en el planeta, que tomemos conciencia de lo importante que es cuidar el medio ambiente, que dejemos de mirar tanto a las pantallas y volvamos a mirarnos a los ojos como antaño. Y que no hagamos a nadie nada que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros. Y ya para terminar, y si puede ser, estaría muy bien que el próximo alcalde de Tudela sea de izquierdas.

Ah... Y que ningunos padres tengan que enterrar a un hijo, porque eso es una verdadera atrocidad.

#‎SafeCreative‬ Mina Cb 

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