PIDO PERDÓN (A LA CIUDADANÍA)

Maquilláo como una drag
para un dramón de tercera
(le diría su asesor
que así daría más pena)

se presentó Pedro Sánchez
el jueves ante la prensa
tras el último follón
que le estalló ante la jeta.

Y aunque no sea, digamos,
creyente de los de iglesia
entonó el “yo pecador”
con propósito de enmienda.

Pero metió la puntita
nada más que un poco, o sea
pidió perdón al país
sin ser culpable del tema.

Y se excusó en paritario
porque es lo que ahora se lleva:
“ciudadanía”, empleó,
que es fórmula casta y neutra

que no hiere, discrimina,
ofende ni menosprecia,
porque al presi, a corrección
no le gana la Academia.

Seguirá, dijo, no obstante,
pese al dolor que lo aqueja,
gobernando este país
porque él lo vale y lo pesa.

Y si tiran de la manta
y algún asunto le afecta
se ausentará, puede ser,
unos días de la escuela

para poder meditar
sin ninguna interferencia.
Líos, putas, comisiones...
Y este en la luna ¡Qué fiera!

#‎SafeCreative‬ Mina Cb